Fútbol Argentino de Luto: Adiós a Daniel Willington, Leyenda

Fútbol Argentino de Luto: Adiós a Daniel Willington, Leyenda

El fútbol argentino está de luto. Daniel Willington, una leyenda que brilló con Vélez Sarsfield y Talleres de Córdoba, falleció a los 83 años. Su talento como volante ofensivo, su elegancia en el campo y su visión de juego lo convirtieron en un ícono del balompié nacional. Willington no solo fue un jugador excepcional, sino también un director técnico que dejó huella en los clubes que amó.

Un Ídolo Forjado en Córdoba y Consagrado en Liniers

Nacido en Guadalupe, Santa Fe, Willington se crió en Córdoba, donde su padre, Atilio Willington, jugó para Talleres. Su amor por la pelota nació en los potreros cercanos a La Boutique, el estadio de la T. Su pegada era impresionante, como lo demostró aquel golazo de tiro libre ante Belgrano en 1974, un remate desde 40 metros que el arquero Tocalli describió como "el gol más impresionante que me han hecho en mi vida".

Debutó en Talleres a los 16 años y luego, en 1962, Victorio Spinetto lo convenció de unirse a Vélez. En Liniers, Willington no solo marcó goles (65 en 212 partidos), sino que también lideró al equipo a la conquista del Nacional de 1968, el primer título de primera división en la historia del club.

El Día que Pelé lo Definió como el Mejor

En 1969, Vélez enfrentó al Santos de Pelé en un amistoso. Tras el partido, que terminó 1-1, Pelé sorprendió al mundo al declarar que Willington era "el mejor jugador del mundo". El propio Willington recordaba con humor aquel momento, destacando la generosidad del astro brasileño.

Además, Willington reveló que estuvo cerca de jugar con Pelé en el Santos. José Amalfitani, presidente de Vélez, se negó a dejarlo ir, considerándolo un hijo. También hubo interés de Boca, River y la Juventus, pero Willington permaneció fiel a Vélez.

Legado Imborrable

Daniel Willington deja un legado imborrable en el fútbol argentino. Su talento, su pasión y su humildad lo convirtieron en un ejemplo para generaciones de futbolistas. Los hinchas de Vélez y Talleres lo recordarán siempre como un ídolo, un símbolo de una época dorada del fútbol argentino.

  • Debutó en Talleres a los 16 años.
  • Ganó el Nacional de 1968 con Vélez.
  • Pelé lo elogió como el mejor jugador del mundo.