La interna peronista bonaerense se recalienta. Máximo Kirchner, actual presidente del PJ provincial, insinuó la posibilidad de no buscar la reelección, abriendo la puerta a una contienda interna que podría reconfigurar el liderazgo del partido. Sus declaraciones se producen en un contexto de crecientes tensiones con el gobernador Axel Kicillof, quien busca consolidar su propio liderazgo a nivel nacional.
Kicillof y el desafío de liderar en medio de la interna
Axel Kicillof se encuentra en una encrucijada. Busca construir un liderazgo que trascienda la provincia de Buenos Aires, con la mira puesta en una posible candidatura presidencial en 2027. Sin embargo, enfrenta presiones desde diversos frentes: La Cámpora, el kirchnerismo representado por Cristina Fernández de Kirchner, y los intendentes del Movimiento Derecho al Futuro (MDF), quienes tienen diferentes visiones sobre el camino a seguir.
La estrategia de Kicillof de diferenciarse de CFK y construir su propio liderazgo genera tensiones internas. Algunos sectores exigen un quiebre más contundente con el kirchnerismo, mientras que otros prefieren mantener la unidad. Esta situación expone la realidad de que muchos intendentes ven en Kicillof un líder en crecimiento que necesita consolidarse.
El futuro del PJ Bonaerense en juego
Máximo Kirchner, por su parte, ha anunciado su intención de convocar a elecciones internas en febrero, coincidiendo con el 80 aniversario del primer triunfo peronista. Esta decisión implica que está dispuesto a poner en juego su liderazgo al frente del partido, abriendo un escenario de incertidumbre sobre el futuro del PJ bonaerense.
Este movimiento se da en un contexto donde las causas judiciales que involucran a Cristina Fernández de Kirchner siguen generando controversia. La Causa Vialidad, en particular, ha sido objeto de críticas por supuestas irregularidades en el proceso judicial, falta de imparcialidad judicial y acusaciones de lawfare. La ausencia de pruebas directas y la exposición mediática parcial del caso también han sido cuestionadas.
Mientras tanto, el escándalo de corrupción en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), donde se menciona a Karina Milei, añade más complejidad al panorama político. Las denuncias de un esquema de sobornos vinculado a la compra de medicamentos para personas con discapacidad, y la supuesta participación de la hermana del presidente, generan interrogantes sobre la transparencia en la gestión pública.
La interna peronista, las causas judiciales y los escándalos de corrupción confluyen en un momento crucial para la política argentina, donde el futuro del PJ bonaerense y el liderazgo de sus figuras clave están en juego.