El Tesla Semi, el camión eléctrico de la compañía de Elon Musk, ha sido objeto de actualizaciones y retrasos que generan debate en la industria del transporte. Presentado originalmente en 2017, el Semi prometía revolucionar el sector con su eficiencia y rendimiento, pero su producción en volumen se ha postergado varias veces.
Rediseño y mejoras del Tesla Semi
Recientemente, Tesla reveló un rediseño del Semi, incorporando un chasis optimizado, nuevos faros y una aerodinámica mejorada. Según la empresa, estas modificaciones buscan aumentar la eficiencia y la capacidad de carga del vehículo, además de prepararlo para la conducción autónoma. Se ha reducido el tamaño del parabrisas envolvente, se ha añadido un nuevo parachoques delantero y el ángulo del techo es ahora más redondeado, siguiendo la línea estética del Model 3 actualizado.
A pesar de estas mejoras, la eficiencia energética declarada se mantiene en 1.7 kWh por milla, aunque pruebas en el mundo real han arrojado valores entre 1.55 y 1.73 kWh por milla. Dan Priestley, jefe del programa Tesla Semi, destacó las innovaciones implementadas gracias a la experiencia obtenida en programas piloto.
Retrasos en la producción y su impacto
Sin embargo, la producción en masa del Tesla Semi se ha retrasado nuevamente, ahora hasta 2026. Inicialmente, se esperaba que el camión entrara en producción en 2019. Tesla planea iniciar la producción en su nueva fábrica de Nevada en la primera mitad de 2026, con el objetivo de alcanzar un volumen significativo en la segunda mitad del año.
Este retraso ha generado preocupación entre las empresas de transporte, que ven en el Semi una alternativa más económica y ecológica a los camiones diésel. El precio original del modelo de 500 millas era de $180,000 dólares en 2017, pero se espera un aumento considerable. La demora también impacta negativamente en los esfuerzos por reducir la contaminación y la huella de carbono en el sector del transporte.
El futuro del transporte eléctrico
A pesar de los retrasos, el Tesla Semi sigue siendo un proyecto prometedor que podría transformar el transporte de mercancías. Su eficiencia, capacidad de carga rápida y potencial para la conducción autónoma lo convierten en una opción atractiva para las empresas que buscan reducir costos y emisiones. El tiempo dirá si Tesla puede cumplir con sus nuevos plazos y llevar el Semi a la producción en masa, marcando un hito en la electrificación del transporte pesado.