Trenes en Buenos Aires: Un Sistema en Crisis por Falta de Inversión
El reciente descarrilamiento en la línea Sarmiento, lejos de ser un incidente aislado, pone de manifiesto una preocupante realidad: la desinversión y el desmantelamiento progresivo del sistema ferroviario bonaerense. Expertos advierten que la falta de mantenimiento y la reducción al mínimo de las partidas presupuestarias destinadas a la infraestructura ferroviaria están llevando al sistema al borde del colapso.
Según el ingeniero Norberto Rosendo, especialista en transporte ferroviario, "todas las líneas han reducido al mínimo las partidas de mantenimiento. Esto implica una acumulación de fallas que, tarde o temprano, terminan manifestándose en incidentes como el ocurrido en Liniers". La falta de personal capacitado y la obsolescencia de los equipos son otros factores que contribuyen a la degradación del servicio.
Consecuencias de la "Motosierra" en los Trenes
La política de ajuste y recorte de gastos, popularmente conocida como "motosierra", ha impactado severamente en el sector ferroviario. La reducción de personal, la cancelación de proyectos de modernización y la falta de inversión en repuestos y mantenimiento han generado un deterioro generalizado de la infraestructura.
- Disminución de la frecuencia de los trenes: La falta de unidades operativas obliga a reducir la cantidad de servicios, afectando la movilidad de miles de usuarios.
- Aumento de los riesgos de accidentes: La falta de mantenimiento preventivo incrementa la probabilidad de fallas en los sistemas de señalización, frenado y vías.
- Pérdida de puestos de trabajo: El recorte de personal afecta a trabajadores con años de experiencia en el sector, poniendo en riesgo la seguridad y la calidad del servicio.
¿Una Tragedia Anunciada?
Ante este panorama desolador, los expertos advierten sobre el riesgo de una tragedia de mayores proporciones si no se toman medidas urgentes para revertir la situación. Es fundamental que las autoridades tomen conciencia de la importancia del sistema ferroviario para la movilidad de los ciudadanos y destinen los recursos necesarios para garantizar su seguridad y eficiencia. La desinversión en el sistema ferroviario no solo afecta la calidad del servicio, sino que pone en riesgo la vida de miles de pasajeros que utilizan el tren como medio de transporte diario.