Un paro sorpresivo de colectivos ha generado un caos significativo en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) este viernes. Miles de usuarios se ven afectados por la medida de fuerza que comenzó a la medianoche y que involucra al menos 16 líneas de colectivos que operan en la región.
¿Qué líneas están afectadas?
Según los informes, la empresa El Nuevo Halcón S.A. comunicó que los conductores de la Línea 148 "no prestarán servicio por tiempo indeterminado" desde las 00:00 hs de hoy. Adicionalmente, trabajadores de al menos otras 15 líneas están implementando una "abstención de tareas" debido a la "falta de pago" de sus salarios, lo que resulta en demoras considerables en el servicio.
La situación se agrava tras conocerse que, luego de 3 días de paro y protestas, las líneas Moqsa y 148 de El Halcón no reiniciaron el servicio este lunes, debido al incumplimiento del compromiso de las empresas de regularizar los sueldos adeudados. Los trabajadores de la línea 148 llevan tres meses denunciando problemas para cobrar sus salarios.
La bronca de los choferes estalló tras no percibir sus salarios en tiempo y forma, a pesar de que el boleto de colectivo en el AMBA ha subido un 600% desde que Javier Milei asumió la presidencia en diciembre de 2023. Las protestas se hicieron sentir en las terminales, con el grito unánime de "poné la plata".
Reclamos y Consecuencias
Los trabajadores denuncian salarios bajos, unidades en mal estado y un aumento desproporcionado en el precio del boleto. Ricardo Santa Cruz, trabajador ferroviario y militante del Movimiento de Agrupaciones Clasistas del PTS, expresó su solidaridad y exigió a la CGT un plan de lucha urgente por salarios, con asambleas, paros y movilizaciones contra la reforma laboral de Milei y los empresarios.
Por el momento, no hay una fecha definida para la finalización de las medidas de fuerza. Se recomienda a los usuarios del transporte público estar atentos a las actualizaciones y buscar alternativas de movilidad.
Esta situación pone de manifiesto la tensión existente entre los trabajadores del transporte, las empresas y el gobierno, con consecuencias directas para la vida cotidiana de miles de personas que dependen del colectivo para trasladarse.